Spencer Tracy ( 1900-1967). El que comparte conmigo esto del mundo del cine, entenderá porque lo venimos a publicar recién en este apartado. Elegido por la crítica norteamericana como el mejor actor de todos los tiempos, cuando el cine cumplió 100 años de vida, es para nosotros un ícono indesmentible de la versatilidad versus la naturalidad impostada. Eso de ver sus marcas en el piso en pleno rodaje de una película y presumir de un sesgo de improvisación asistida, nunca estuvo mal para ejemplificar como debe ser la vocación del actor de sangre y huesos. Con Tracy asistimos a los mejores recursos histriónicos que ha tenido un artista educado con los jesuitas y de fuerte ascendencia irlandesa. Durante la posguerra asistió a cursos de Arte Dramático en la Academia de Arte Dramático de Nueva York. En 1922 debita en Broadway actuando como un robot y durante los años veinte recorre Estados Unidos con diferentes compañías teatrales. Con el advenimiento del sonido, llega a Hollywood donde debuta como estelar en "Up the river" de John Ford, y durante la primera mitad de los años treinta, trabaja en 27 películas la mayoría para los estudios 20th. Century Fox, como "Sangre joven" y "Fueros humanos", dirigido por Frank Borzage "20.000 años en Sing Sing" de Michael Curtiz, y "Marie Galante" realizada por Henry King. En 1936 pasa a la Metro Goldwyn Mayer y durante los quince años que permanece en ellos, se convierte en una estrella. Entre sus mejores películas deben considerarse : "Furia" de Fritz Lang, "Edison, el hombre" de Clarence Brown, "El extraño caso del doctor Jekyll" de Victor Fleming, "El padre de la novia" de Vincente Minelli, y siete extraordinarias comedias junto a su partenaire habitual y pareja de toda la vida, Katharine Hepburn, como las clásicas : "La mujer del año" de George Stevens, "El estado de la Unión" de Frank Capra y "La costilla de Adán" y "La impostora", ambas de George Cukor. Nominado en nueve ocasiones para ganar el Oscar, lo obtiene por dos películas diferentes "Capitanes Intrépidos" de Victor Fleming, donde interpretó al marinero portugués Manoel , y "Con los brazos abiertos" de Michael Curtiz, donde encarnó al padre Flanagan. De su última etapa, también son dignas de sobresalir : "Conspiración del silencio" de John Sturges, "El último viva" de John Ford, "El mundo está loco, loco, loco" y "Adivina quien viene a cenar esta noche" ambas de Stanley Kramer.
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