"La Gloria de mi padre" se construye sobre los recuerdos entrañables del cineasta Marcel Pagnol sobre su familia, y resume las constantes del cine nostálgico de mirada infantil. |
Si el Cine tiene la capacidad acertiva de rememorar un pasado, con la mirada romántica del escritor autobiográfico, también es un canal idóneo para reconocer otros tiempos, con la estética de quien idealiza sus recuerdos de la infancia o adolescencia.
La nostalgia ha sido una de las constantes temáticas del cine en general, que reflota sobretodo en períodos de complejidad social, económica o política.
Este interés por el pasado, ha adoptado diversas formas en la pantalla.
Pero en realidad ¿ Qué quiere decir la nostalgia en el cine ?
Etimológicamente "nostalgia" deriva de las palabras griegas : "nostos" ( hogar ) y "algos" ( dolor) y significa, tanto el dolor por la pérdida del hogar, como el deseo de volver a él.
Referida al tiempo, expresa el anhelo de volver al pasado , la idea de que "todo tiempo pasado fue mejor".
Sin embargo, no todos los filmes ambientados en el ayer son necesariamente nostálgicos, y de una u otra forma, tampoco las obras "históricas" son fundamentalmente el "anhelo" idealizado de los viejos recuerdos que no mueren jamás.
Lo que pasa, es que existen numerosos directores que, cuando asumen su "perspectiva" de una época, tienden a mirarla con ojos afectuosos, incluyendo aquellos que integran la crítica reflexiva " en películas que, pretenden denunciar o condenar determinados aspectos negativos y que terminan sometidos a su influencia".
En el cine infantil, es una constante temática desde que, el propio Charles Chaplin impregnara de acento autobiográfico su obra "El Pibe"/"El Chico" ( "The Kid", 1921 ), añadiéndole un "aire dickensiano" a las atmósferas no desprovistas de candorosa humanidad.
En el Cine Francés.
"Juegos Prohibidos" dimensiona con emoción y lirismo el flagelo de la guerra, desde la candidez de los niños abandonados a su destino. |
Clave resultan en la película, las actuaciones de los prodigios franceses Briggite Fosey y George Poujouly. |
El film dirigido por René Clément, ganó el León de Oro en la Mostra de Venecia. |
En el cine europeo, la nostalgia infantil también parece ser una norma vigente, aún en tiempos de avance comunicacional, y aunque en la mayoría de los casos, prima la autocrítica social, se superponen con equilibrio, cuestiones relativas a "otras épocas" contadas desde el corazón.
En el cine francés, desde "Los 400 Golpes" ( "Les Quatre cents coups", 1959) de Francois Truffaut, se abrió una veta fructífera de rememoranzas infantiles, aunque en el país se venían haciendo películas de sínodo dramático desde la Gran Guerra, y después, cuando concluyó la Segunda Guerra Mundial.
"Juegos Prohibidos" ( "Jeux Interdits", 1952 ) de René Clément, es un clásico que mantiene inalterable su dura crítica sobre la guerra, desde la perspetiva infantil de dos criaturas : la huérfana de un bombardeo ( Briggite Fosey ) y el chico campesino ( Georges Poujouly ), que la cuidará como si fuera su "hermanita".
La cinta mantiene inalterable su capacidad de emocionar, con golpes duros y realistas ( el bombardeo de los nazis desde el aire; el entierro de los animales en un improvisado cementerio armado con cruces robadas; la soledad de la niña en medio de la debacle ), y adquiere un matiz documental, por el ilustrativo paso de la orfandad de una chiquilla abandonada a su suerte, a la tuición insegura de anónimos padres que nunca conoceremos.
Ganadora del León de Oro de la Mostra de Venecia, se beneficia de la notable dirección de Clément , que mantiene atmósferas de un realismo rural escrutador, visceral, elocuente y marginal; y la magnífica música en guitarra de Narciso Yepes, que dimensiona la tragedia de la soledad, con particular sentido acústico.
Aporte significativo resulta la fotografía de Robert Juillard, porque asume los tonos dramáticos del relato, con una estética expresionista que bebe del matiz documental y del relato costumbrista vivencial.
Los niños Brigitte Fosey y Georges Pujouly están estupendos, no sólo porque se produce una "química" entre ambos difícil de olvidar, sino porque se integran con naturalidad a las diversas fases de un proceso de amistad transitoria.
Un clásico por revivir en la comodidad del DVD hogareño.
Entrañables vacaciones en el campo.
La cinta "La Gloria de mi padre" reconstruye la infancia del realizador Marcel Pagnol con grandes recursos estético- narrativos. |
"La Gloria de mi padre" ( "La Glorie de mon pére", 1990 ) y "El miedo de mi madre" ( "Le Chateau de ma memé", 1990), es el díptico producido por los estudios Gaumont con la dirección del eximio Yves Robert, que reconstruye la infancia del realizador Marcel Pagnol ( 1895-1974).
Nostálgica comedia de costumbres, desarrollada entre Marsella y la Provenza, hurga con detenida emoción en los textos autobiográficos del célebre director de "Topaze"(1933), "Angéle" ( 1934 ) y "César" ( 1936), que obtuvieron el reconocimiento del público más amplio en su época.
"Su confesado desprecio hacia las técnicas específicamente cinematográficas, le valió durante un tiempo la hostilidad de la crítica; paradójicamente fue rehabilitado como cineasta digno de tenerse en cuenta, por los neorrealistas italianos y la "nouvelle vague" francesa".
"La Gloria de mi Padre" ( 1990 ) es una cinta perfecta, equilibrada, emocional, bella, divertida, agradable, sensible, menospreciada por su excesivo literalismo ( la voz en "off" de Jean-Pierre Darras, es un tercer protagonista que insistentemente remarca las acciones ), y llena de nostálgicas añoranzas por la vida cotidiana del 1.900. El filme se centraliza en la vida de Joseph ( Philippe Caubére ), el padre de Pagnol, un profesor rural, agnóstico, con tres niños, que después deberá ejercer en un prestigioso colegio de Marsella, adaptándose a los cambios con marcada inseguridad y latente incertidumbre.
Toda la historia, la conocemos a través del pequeño Marcel ( el expresivo niño actor Julien Ciamaca ), en sus relaciones paterno- filiales, sus compostelas lúdicas, sus desaforados encuentros con la estrictez educativa, su amor infinito a mamá, su admiración cercana a papá, sus constantes incursiones en el mundo rural, cuando se desplaza de vacaciones y se hace amigo entrañable del pequeño pastorcillo del pueblo, entre viñetas de la vida estival, la solariega e inolvidable nostalgia por aquellos tiempos, que marcaron para siempre la existencia del cineasta.
Aporte sensible es la partitura musical de Vladimir Cosma, una "soundtrack" magnífica en sus resoluciones intuitivas, relativas a los mágicos momentos del muchacho en la caza; o en la dimensión del recuerdo familiar plagado de pequeñas anécdotas gratas y esencialmente divertidas.
No se olvidan momentos especialmente sensibles al recuerdo infantil como : la creencia de que tener bebés es simplemente desabrocharse el ombligo; las cigarras en los bolsillos durante la cena campestre; la persecución tras los cazadores furtivos; la mitología de la lechuza; la desnudez tras la tormenta sorpresiva y la cena exquisita de las aves de presa.
El mito de la lechuza salvaje durante la travesía del pequeño Marcel. |
Un gran despliegue de elementos para recrear el 1.900 en Marsella, caracterizan la obra de Yves Robert. |
La familia de Marcel según la magia del cine francés. |
Las incursiones del padre de Marcel ( Philippe Caúbere ) en la caza, adquieren un esfuerzo cómplice con el hijo por lograr las mejores presas del paseo. |
El talentoso Julien Ciamaca, interpreta al pequeño Marcel en las vacaciones inolvidables de su vida. |
La comida en el atardecer disfrutando del descanso palaciego. |
El retrato costumbrista incluye prácticas deportivas, que son parte del patrimonio cultural del país. |
"Le Chateau de ma mére" : insiste en la figura maternal con todos sus traumas y fortalezas. |
Personajes secundarios singulares, integran las aventuras familiares por los campos veraniegos. |
El recordado realizador Yves Robert, durante el rodaje de su interesante díptico de nostalgias infantiles. |
El trofeo de caza en manos de Marcel y la gloria de su padre en medio de los acantilados montañosos. |
Los lazos afectivos eternos, que se recuerdan con candorosa emoción en las dos películas. |
Si "La Gloria de mi padre" ( 1990 ), es una producción fundamentalmente cuidadosa en su reconstrucción de época, con cierta tendencia al preciosismo fotográfico, muy bien narrada e interpretada por un elenco que encabezan : Philippe Caubére , Nathalie Roussel, Didier Pain, Theresé Liotard y los niños Julien Ciamaca y Victorien Delamare, su continuación inmediata "Le Chateau de ma meré"( 1990), no llega a los niveles de exactitud de su original, quizás porque parte de la premisa, está en atender un soliloquio algo endeble, relativo a los paseos al campo y concentra su atención en secundarios lineales, como la niña malcriada de un artista fugaz o los guardias de los porticos de las propiedades privadas, que circulan cerca de un canal de regadío donde transcurre la acción.
Ya no está el niño Marcel y su amigo preocupado de los cambios climáticos, o los secundarios interesantes que conforman parte del pueblo : Francois y sus peroratas acerca del juego de bolos; el señor Cura y sus aplicados encuadres tras la cámara fotográfica; el viejo amo de las mariposas que vaga de campo en campo, cazando pajarillos para subsistir, etc.
Todo se remite a una mirada más directa a la sensibilidad de su madre, que no logra empatizar del todo con el ambiente que le rodea, aunque igual emociona, por el destino que tomó cada uno de los personajes en la vida posterior.
Este interesante díptico que reconstruye la infancia del cineasta Marcel Pagnol, cuenta con la dirección del dotado Yves Robert ( 1920-2002 ), que ganó el "Grand Prix" Jean Vigo con su obra maestra infantil "La Guerra de los Botones" ( de la que ya hablamos en anteriores entradas ).
Se trata de un realizador talentoso que en sus mejores momentos, obtuvo el Oso de Oro en Berlín por "Le Grand Blond", y el César al Mejor Filme por "Nous Irons touts Au Paradis" en 1977.
Lili y Marcel : la amistad que nunca se olvida. |
"Hay momentos de alegrías, ensombrecidos por tristezas inolvidables.
Eso no hay que contárselo a los niños".
( De la película "Le Chateau de ma meré" ).
En el cine nórdico.
Los recuerdos infantiles del cineasta Ingmar Bergman adaptados a la pantalla por su hijo Daniel con gran virtuosismo y exquisita estética. |
El pequeño Henrik Linnros en brazos de su padre cinematográfico Thommy Berggren. |
Seguramente "Niños del Domingo" ( "Söndagsbarn", 1992) de Daniel Bergman, asume el matiz autobiográfico directo de los recuerdos agridulces del maestro del cine sueco Ingmar Bergman.
Lo cierto es que, esta pequeña obra maestra, alcanza su exégesis en la mirada caprichosa con que disecciona ese verano en Norrland del pequeño Pu ( Ingmar ) con su atribulado padre ( Thommy Berggren ), un pastor protestante estricto, de un carácter complejo, frustrado en sus relaciones maritales, y absolutamente volcado a su profesión, a costa de impregnar de miedo una familia, y perpetrar relaciones violentas con sus retoños, y una distancia autodestructiva.
La cinta está desarrollada con la exquisitez plástica de esas pequeñas obras de cámara, que aprovechan equilibradamente sus economías en razón de sus recursos expresivos.
Nada de lo que se cuenta, se teje en razón de una verdad a medias. Más áun, pareciera que Bergman a cada momento está expurgando sus propios miedos y ansiedades, con la mirada del hijo cómplice que le dirige su propio guión. De ahí sus resultados nostálgicos, teñidos de angustia, de frustraciones equiparables al engaño matrimonial en la adultez.
La merienda de la campesina a la que el pequeño Pu desea probar sus pechos como lo hace uno de sus hijos; la diarrea neurótica del niño contenida por la furia y las constantes peleas con su hermano mayor; el choque personal con la religión producto de la excesiva dedicación de un padre que nunca adultera sus propios desaciertos conyugales con las prácticas verbales de los libros sagrados; y el insistente tufillo a hipocresía adulta que el niño protagonista "siente" y "menosprecia" con el sigilo del testigo preferencial, que observa desde las penumbras de los rincones de su casa, cómo se derrumba el amor y la confianza de su propia familia; son momentos sublimes que Daniel Bergman remarca con la pasión del narrador contenido.
Una mención especial merecen las actuaciones del elenco adulto, pero los niños son parte motora del drama y logran transmitir toda la ansiedad de los momentos más difíciles.
Sobresale el pequeño Henrik Linnros ( nacido en 1982 ), que debutó en el cine con esta magnífica película, para mantenerse en la profesión hasta el 2003.
Su carisma no sólo es escrutador para revelarnos las frustraciones de la infancia que doblegan el camino a la vida adulta, sino tremendamente impulsivo.
Sabe contenerse, pero también demostrar todo el terror que crece en su alma , a propósito de viejas leyendas rurales, castigos paternales e inquietudes dogmáticas. Sin duda, el pequeño Pu es Ingmar Bergman, en una película que sirve para confirmarnos, los verdaderos orígenes de los temas culposos, que caracterizaron la obra del célebre maestro del cine sueco.
En el cine español.
Las relaciones familiares trastocadas por la pasión de dos hermanastros que viven enamorados. Aquí el niño actor Perú Medem. |
Ana ama a Otto porque le recuerda a su desaparecido padre. |
El gélido paisaje nórdico juega un rol fundamental en la ambientación del conflicto dramático. |
La unión familiar escaldada por la pasión adolescente. |
La magnífica actriz Najwra Nimri esperando el encuentro providencial con su eterno enamorado. |
Alabada por su notable capacidad expresiva, la cinta española "Los Amantes del Círculo Polar" ( 1998 ) de Julio Medem, resulta ser una experiencia, en verdad, novedosa, significativa y afortunada.
Por distintas razones, me ha tocado disfrutarla numerosas veces, ya que la tengo en DVD y es una de mis películas favoritas en lengua española.
Relato narrado de forma completamente original, nos obliga a entender el tema del destino como un golpe escrutador de belleza, soledad y pasión.
A partir del encuentro entre Ana y Otto, desde la infancia hasta la madurez, dos hermanastros que han estado toda la vida enamorados, el director explora por los límites de significación que tienen las fronteras del cariño.
Ella lo ama a él, porque cree ver en aquél , la encarnación de su fallecido padre.
El la ama a ella, porque cree ver la encarnación del amor ausente ( una mezcla extraña entre maternalismo desheredado, fobia a la soledad y desasosiego espiritual ).
Con un notable uso de los recursos expresivos audiovisuales ( intertítulos que van y vienen por las vidas de Otto y Anna ; excelente uso de las elipsis, subrayado uso de cámara subjetiva, sugerente atmósfera invernal con un estético trabajo de ambientes y atmósferas naturales ), y una magnífica labor interpretativa, desde los adultos Fele Martínez, Najwra Nimri y Nacho Novo, a los niños protagonistas, esta maravillosa película se circunscribe en las antípodas del amor idealizado, para acercarnos a un mundo donde las distancias y el misterio del encuentro, sólo pueden ser atribuíbles a la casualidad del destino, manejado por los pálpitos del corazón.
Se trata de una película de una complejísima estructura narrativa, llevada a buen puerto por Medem, que acentúa el valor de la predestinación dentro de una búsqueda constante por mantener el equilibrio espiritual de sus personajes.
En el cine hindú.
"Pather Panchali" / "El lamento del sendero" : el punto de arranque de una trilogía que hizo conocido al cine indio en todo el mundo. |
Imágenes costumbristas que revelaron el estilo neorrealista del director Satyajit Ray. |
Ray y Sibatra Mitra en el rodaje de "Pather Panchali". |
Un travelling construído para rodar la célebre película inicial. |
"Aparajito" : la segunda parte con la infancia de Apu y la separación de su madre. |
"El mérito se debió a Satyajit Ray , intelectual de Calcuta, nieto de un escritor y periodista e hijo de un artista prestigioso, y producto directo del llamado "renacimiento bengalí", que recuperó para esa región de la India, con Rabindranath Tagore en el centro, el liderazgo intelectual y artístico de otras eras".
"Pather Panchali" ( 1955) es el punto de inicio de la trilogía, inicialmente desarrollada en un pueblito de Bengala hacia 1910, y que conocemos a través de la mirada del pequeño Apu Sansar ( Subir Bannerjee ), que malvive con su familia debido a la falta de dinero, la súbita muerte de su abuela y el ataque de los monzones.
La película está recorrida por una infinita poesía, que se traduce en momentos increíbles como : el paseo de Durga, la hermana de Apú por los campos de biscantus ( una planta conocida por estos lares comúnmente como"colas de zorro" ), para observar como el tren atraviesa por la floresta.
Todas las anécdotas están impregnadas de un soplo vital, que pueden ser divertidas ( el vendedor de dulces ) o dramáticas ( la súbita muerte de Durga por una pulmonía producto de una accidental mojada ).
Además, toda la experiencia del traslado familiar a Benarés, está dimensionada por el director desde la óptica religiosa, lo que le da un matiz emotivo adicional.
Ray inició su "odisea por el cine" con una cámara de 16 mm y un presupuesto inicial de 710 libras.
El niño actor, Subir Bannerjee fue descubierto por la esposa del director jugando al lado de su casa, después de efectuar fatigosos "casting" por colegios y sitios recreacionales.
En el elenco, sólo había dos actores profesionales : Revi Debi que desempeñó el rol de un rico vecino que mastica nueces y la veterana Chunibala Devi, de 80 años.
La cinta ganó el Festival de Cannes y puso en la mirada internacional al desconocido cine hindú, a la sazón, el país que produce más cine en todo el mundo. Alrededor de 800 largometrajes al año.
"Aparajito" ( 1956) que gira en torno a la separación maternal de Apú, ganó el Festival de Venecia en 1957, y mantiene el excelente nivel en los diálogos, la estupenda labor fotográfica de Subatra Mitra - el cameraman de Ray- y la originalidad en su propuesta estilística.
En "El Mundo de Apu" ( 1958) donde el protagonista se transforma en un padre con un hijo difícil, Ray se la juega a fondo con el lirismo de sus imágenes.
"Una cámara que parece querer la invisibilidad - como en el neorrealismo- registra, con perfecto y mágico sentido del tiempo y del espacio, los sentimientos que embargan a Apu, la cosmológica soledad que lo invade, la silenciosa rebeldía frente al inmutable ciclo de la desolación".
El filme obtuvo el "Sutherland Trophy Award" en el Festival de Londres de 1960.
Definitivamente, gracias a estas películas, el cine indio fue conocido en todo el mundo. Una instancia valedera para redescubrirlas en DVD.
En el cine latinoamericano.
"El Faro del Sur" explorando por las relaciones de dos hermanas inseparables. |
Desde la cinta chilena "Machuca" ( 2000) de Andrés Wood hasta la película argentina "El Faro del Sur" ( 1998 ), el cine de nuestro continente también ha abordado a su modo, la temática de las añoranzas o recuerdos del pasado con nostalgia infantil, pero también un áspero, y a veces, amargo sentido crítico muy vinculado a los tiempos de persecución política, control interno de la información y despropósitos ideológicos, que gatillaron divisiones y prohibiciones totalitarias.
"Machuca" ( 2000 ) en su perspectiva, reconstruye la etapa más beligerante de la historia nacional antes, durante y después del golpe militar, desde la mirada de un niño preadolescente ( Matías Quer ), que debe compartir su sala y sus experiencias vitales, con un chico de una población marginal ( Ariel Mateluna ), a propósito de un experimento de reinserción social que están llevando a cabo los sacerdotes de su colegio de barrio acomodado.
Armada con los retazos y viñetas de los momentos más característicos de la vida de este escolar, retoma la nostalgia de una época, ayudado de una serie de detalles en su puesta en escena, que recomponen un momento en la historia del país. Desde las consignas políticas rayadas en las murallas, hasta las portadas de diarios y revistas de su tiempo, las transmisiones radiales y televisivas, la música y la moda, las fiestas y los cánticos en las marchas, todo le sirve a Wood para graficar los aspectos más característicos de un momento histórico.
"El Faro del Sur" ( 1998 ) por su parte, es una crónica realista narrada por "Memé"/ Carmela ( Ingrid Rubio ), una minusválida argentina que vivió mucho tiempo en España y que, al retornar a su tierra, choca con su hermanita menor Aneta ( de niña, la estupenda Jimena Barón; de adulta, la sensual Florencia Bertotti ), en el automóvil conducido por su madre, quien muere en el accidente con su hermano pequeño.
Ambas hermanas vivirán en el transcurso de siete años, toda una reconversión vital en una búsqueda constante del amor filial, remarcadas por inseguridades emocionales, rupturas manifiestas y un cariño infranqueable a prueba de golpes.
El director argentino Eduardo Mignona elaboró este elocuente drama humano con el detallismo de un taxidermista, que disecciona su presa con la fineza del bisturí, para reverlarnos la fragilidad con que están hechas las emociones de la vida.
Rodada en Uruguay en las locaciones de Santa Lucía, Colonia, Montevideo y José Ignacio, y en Buenos Aires, la película se sigue con mucho interés por la maravillosa forma de describir los personajes.
Estupendamente interpretados, se apoyan en las magníficas actuaciones secundarias de : Norma Aleandro, Norberto Díaz, Ricardo Baron , Mariano Martínez, Roberto Vallejos e Ina Casares.
Como el mejor cine intimista europeo, "El Faro del Sur" desnuda el alma de sus personajes, en razón de una cámara siempre atenta a los detalles físicos ( gestos, miradas cómplices, movimientos corporales, paisajes bucólicos ) logrando una acertiva compenetración sicológica y una suerte de emocionalidad, que hace de Carmela, Aneta y sus amigos, entrañables componentes de la vida humana.
"Machuca" y "El Faro del Sur", son dos de los mejores ejemplos, que ha dado nuestro cine, respecto al tema de las nostalgias infantiles.
Como muchas otras cinematografías, existen innumerables ejemplos al azar, que elevan la discusión respecto al estilo de abordar el pasado.
Sin embargo, en esta ocasión, nos hemos concentrado en algunos ejemplos más peyorativos que, seguramente, te incentivaran a revisitarlos en la comodidad de tu equipo de DVD hogareño.
Glosario de Películas Infantiles.
En esta ocasión, nos concentramos en seleccionar nuevos títulos para completar la videoteca de la casa. Ojo, incluímos películas para adultos protagonizadas por niños, y numerosas obras de tono familiar "para todo espectador", como una manera de ampliar la mirada que se tiene respecto a la temática infantil y adolescente que nos preocupa. Bonne apetite !!!!!
Fotos -Gentileza : Amsterdam University Press - The Hindú - Satyajit Ray Society - Julio Menem.Org- CasperWorld - ChildStarlets - Canal RGZ - Gaumont - Pathé - MGM - Warner Brothers - Universal Pictures - RKO - The New York Times - Dr.Macro- HollywoodWeb - Puré cine- Lobby-cards Archivo Personal.-
Afiche promocional de "Alicia en las ciudades" de Wim Wenders. |
Poster publicitario de la película "El pueblo de los malditos" de Wolf Rilla. |
Afiche de "El Poderoso" de Peter Chelsom. |
Poster del film coreano "Camino a Casa"dirigido por Jeoung-Lyang Lee. |
Afiche de la película francesa "La Gloria de mi Padre" de Yves Robert. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario